METEORITOS
El término meteoro proviene del griego meteoron, que significa fenómeno en el cielo. Se emplea para describir el destello luminoso producido por la caida de la materia que existe en el sistema solar sobre la atmósfera terrestre lo que da lugar a una incandescencia temporal resultado de la fricción atmosférica. Esto ocurre generalmente a alturas entre 80 y 110 kilómetros (50 a 68 millas) sobre la superficie de la Tierra. Este término se emplea también en la palabra meteoroide con la que nos referimos a la propia partícula sin ninguna relación con el fenómeno que produce cuando entra en la atmósfera de la Tierra. Un meteoroide es materia que gira alrededor del Sol o cualquier objeto del espacio interplanetario que es demasiado pequeño para ser considerado como un asteroide o un cometa. Las partículas que son más pequeñas todavía reciben el nombre de micrometeoroides o granos de polvo estelar, lo que incluye cualquier materia interestelar que pudiera entrar en el sistema solar. Un meteorito es un meteoroide que alcanza la superficie de la Tierra sin que se haya vaporizado completamente
En la actualidad, la NASA ha desarrollado un programa informático denominado Sentry (Centinela), cuyo objetivo es cotejar los datos sobre los diversos cuerpos celestes con una órbita que pase cerca de la Tierra. Este programa se encarga de conectar a todos los observatorios y astrónomos del mundo para que intercambien sus estudios y comparen sus cálculos, de esta forma se mantienen en constante comunicación. Según la NASA ya se ha estudiado el recorrido futuro de 500 asteroides, pero todavía quedan otro medio millar sin identificar, aunque en el año 2008, la agencia espacial pretende tener acabada esta investigación.
Clasificación de los meteorito y porcentaje que cae a la tierra
Los meteoritos son difíciles de clasificar, pero se pueden establecer tres grandes grupos: rocosos, ferrosos de tipo rocoso y ferrosos. Los tipos de meteoritos y el porcentaje que cae a la Tierra son:
Meteoritos rocosos
Condritas (85.7%): contienen elementos, tanto volátiles como oxidados y se cree que se formaron en el cinturón interior de asteroides. Estos pueden a su vez ser:
Carbonáceos: Tienen proporciones más altas de elementos volátiles y son las más oxidadas, por lo que se piensa que se formaron incluso a mayor distancia del Sol.
Enstatita: se cree que se han formado en el sistema solar más interno.
Acondritas (7.1%): Se piensa que están formados por material reprocesado o diferenciado, debido a la fusión y recristalización sobre o en el interior del meteorito progenitor.
Meteoritos Ferrosos de tipo Rocoso (1.5%)
Pallasitascompuestos por olivino rodeado por metal.
Mesosideritas
Meteoritos Ferrosos (5.7%) Compuestos básicamente por aleaciones de hierro-níquel con pequeñas cantidades de carbono, azufre y fósforo.
El movimiento de los meteoroides puede ser alterado gravemente por los campos gravitatorios de los grandes planetas, la influencia gravitatoria de Júpiter es capaz de modificar la órbita de un asteroide del cinturón principal para que se sumerja en el sistema solar interior y atraviese la órbita de la Tierra. Este es aparentemente el caso de los fragmentos de asteroide Apollo y Vesta.
Las partículas que se encuentran en órbitas muy parecidas reciben el nombre de corriente de partículas y aquellas que siguen órbitas erráticas se denominan componentes esporádicos. Se piensan que la mayor parte de las corrientes de meteoros están formadas por la desintegración del núcleo de algún cometa y consecuentemente se distribuyen alrededor de la órbita original del cometa. Cuando la órbita de la Tierra intersecta una corriente de meteoros, aumenta el número de estos y se produce una lluvia de meteoros. Estas lluvias suelen continuar durante varios días. Si la lluvia es particularmente intensa recibe el nombre de tormenta de meteoros. Se cree que los meteoros esporádicos presentan una pérdida gradual de su coherencia orbital que se convierte en una lluvia de meteoros debido a las colisiones y los efectos radiactivos, aumentados por las influencias gravitacionales. Existe todavía el debate sobre la relación que existe entre los metoros esporádicos y las lluvias de meteoros.